La cultura del té en oriente es una muy arraigada y milenaria, de hecho es una que a nosotros como occidentales quizá nos sea un poco desconocida, pero que bien vale la pena saber porque es una en la que podemos encontrar apasionantes manifestaciones culturales e historias que son atrapantes. ¿Qué tal hablar un poco más de esto?
Ceremonia del té en china
En china la ceremonia del té es una representación de arte, de elegancia en la ejecución y de harmonía tanto en sabores como en los movimientos que forma quien sirve el té. Es impresionante ver cómo cada detalle se cuida meticulosamente, cómo cada paso tiene sus utensilios a emplear y cómo todo requiere de un proceso de preparación incluso antes de ser servido el té y por supuesto preparado.
Es curioso que en china el número de teteras se eleva a tres, ya que una sirve para calentar el agua y es por lo general la más grande, otra para atemperar los instrumentos que son la tetera para preparar el té y los vasitos donde se sirve que son chicos y de fina porcelana por lo general, y una última tetera se usa para preparar el té. La segunda tetera con la que se temperan los instrumentos también sirve para servir el té.
La tranquilidad y armonía en la ceremonia del té en China debe presentarse también en la persona que realiza el ritual, pues quienes degustan el té deben verse complacidos por el despliegue de suntuosidad de esta ceremonia que exalta suavemente todos los sentidos.
Ceremonia del té en Japón
En Japón también podemos encontrar que la ceremonia del té es muy extendida, siendo comúnmente debida en ella el té tipo matcha, y es una tradición más ceremonial probablemente porque fueron los monjes budistas los que introdujeron el beber té.
En la ceremonia podemos ver que se da prioridad a elementos que para los japoneses son relevantes y de valor como la armonía en los movimientos al servir el té, la tranquilidad de todo el ritual, la pureza del té y del ritmo en que se lleva a cabo la ceremonia, así como el respeto en el ritual que se sigue para tomar el té que es mucho más que simplemente tomar un par de infusiones, ya que formalmente tomar el té en una ceremonia completa o cha-ji puede tener una duración de entre tres a cuatro horas.
La cultura del té fuera de oriente
Lo curioso es que el té ha estado embestido de cierto sentido de ceremonia por varias culturas, no solamente la oriental, ya que quizá como producto de la importación del té de calidad es que en Inglaterra podemos ver cómo la hora del té es casi sagrada y conlleva una actividad que se realiza en el hogar y en el trabajo, añadiéndose como una manifestación cultural impregnada en la cultura.
El té sin duda es un mundo fascinante del que vale mucho la pena conocer, como una cuestión cultural de la que podemos aprender y sobre todo, degustar deliciosas formas de enriquecernos.